Los últimos días de la Segunda...

No cabe duda, este año la Segunda División tocó fondo. La renuncia de Alianza Atlético y CNI de participar en el campeonato, junto a la salida de la Universidad San Marcos por la puesta falsa, fueron las variables perfectas para dar inicio a una crisis que ni el más pesimista hubiera imaginado. Clubes que pierden puntos en mesa, equipos a la deriva que amenzan con renunciar, planteles que llevan más de 3 meses sin cobrar y lo que es peor: la falta de interés de la FPF para remediar la situación. Ni que decir el directorio de la Segunda que parece ser un espectador de lujo en medio de todo este zafarrancho. 

El Torneo de Ascenso se ha convertido en un verdadero bodrio. En la ADFP-SD "Pancho" Gonzáles y compañía poco o nada han hecho por sacar este barco a flote; demás está decir que hace tiempo tenían que haberse ido porque sinceramente cualquier hijo de vecino podría manejar este mucho mejor de lo que lo han hecho en los últimos 2 años. Resulta inaudito que un certamen que cuenta con tan sólo 10 equipos se esté quedando ahora con 8 y semana a semana se estén disputando sólo 3 encuentros. Lo que es peor es el mutismo absoluto de parte de la Segunda, hace tiempo que deberían haber convocado a una conferencia de prensa para explicar a los medios que si les importa y a los aficionados que siguen la categoría lo que viene ocurriendo; pero tal parece que para la ADFP-SD: "Todo está bien".

Las odiosas comparaciones de siempre nos llevan a soñar a los más optimistas a soñar con tener en un futuro cercano un Torneo de Ascenso similar al de Argentina, el cual despierta un verdadero interés de parte del aficionado promedio. Lamentablemente eso no ocurre en nuestro país y lejos de adaptarnos a la realidad simplemente se ha optado por ignorar la necesidad de contar con un verdadero filtro para separar a los clubes profesionales de los equipos amateurs. Este es un cambio más que necesario porque si bien la Copa Péru tiene su atractivo, existe una necesidad real por modernizar el sistema de ascensos en nuestro país que es hoy por hoy uno de los más paupérrimos de América Latina. 

Si se quiere realizar un verdadero cambio se tienen única y exclusivamente dos opciones reales: convertir a la Segunda División en el único medio para llegar a la primera división o bien crear divisionales dentro de la Copa Perú para así reorganizarla; porque señores el fútbol peruano está atravesando una tremenda crisis y son pocos los que quieren darse cuenta. El buen papel que cumplió nuestra selección en la pasada Copa América no fue más que un espejismo de la realidad en que nos encontramos. Para llegar al Mundial hay que ubicarse entre los 4 primeros de Las Clasificatorias y no de la Copa América (OJO). 

La Segunda División se está muriendo, simple y sencillamente ni la Federación Peruana de Fútbol ni la misma ADFP-SD tienen la predisposición de cambiar la historia aún cuando el directorio de la Segunda afirme lo contrario. Estamos pues ante los últimos días de un campeonato que valgan verdades está peor organizado que un torneo de fulbito de barrio (con el respecto que estos campeonatos se merecen ya que en ellos participan varios jugadores de la Segunda con tal de recursearse). La situación de la Segunda es ya insostenible y sinceramente dudo mucho que la cosa pueda mejorar.

Por Giancarlo Córdova - Twitter: @SegundaPeru