Torino volvió a ser Torino

Sueldos atrasados, malos resultados que lo ubican en la parte baja de la tabla y un presidente pidiendo públicamente que Petroperú asuma las deudas con el plantel... esa es la realidad del Club Atlético Torino en este 2014, la misma historia de las temporadas 2009, 2010, 2011 y 2012; esas fueron temporadas en las que el equipo a duras penas pudo llegar al final del campeonato acumulando deudas con la Agremiación.

La campaña 2013 fue un verdadero oasis en medio de un desierto de decepciones y sufrimientos de la siempre fiel hinchada que desde la llegada del cuadro granate a Segunda se acostumbró a ver al equipo de sus amores peleando por salvar la categoría y batallando para salvarse de las sanciones de la ADFP-SD. 

El año pasado Torino demostró que se puede pelear por el ascenso con bajos recursos y con jugadores de la zona que estén dispuestos a sudar la camiseta en cada jugada. El año pasado Torino sorprendió a propios y extraños con un gran rendimiento en el Torneo de Ascenso y que lo llevó a pelear el título con equipos mejor pintados económicamente como Alfonso Ugarte y Los Caimanes. Pero la buena actuación del "Taladro" no solo se dio en el plano deportivo sino también en el aspecto económico e institucional pues, contrario a lo que muchos pensaban, se logró pagar la deuda con la Agremiación y sanear la economía del club. 

Gran parte de este logro se debió a la gestión de Jorge "Koki" Herrera, quien asumió las riendas de la institución en momentos en que nadie quiso poner las manos al fuego por Torino y cuando algunos nefastos ex dirigentes que tuvo el club sugerían renunciar a seguir participando en Segunda y regresar a la Copa Perú para tentar el ascenso desde su liga distrital. Afortunádamente esto nunca se dio.

Si bien Koki Herrera mejoró la situación del club, este año ha borrado parte de lo bueno que había hecho. Se armó un plantel caro que no está acorde a la realidad económica del club, se dejaron ir jugadores claves y piezas de recambio importantes debilitando el plantel. Se le vendió al hincha la idea de que con jugadores limeños se podrían cubrir esas ausencias, pero estos jugadores no comprenden la responsabilidad que implica vestir la camiseta granate como si lo hacen futbolistas jóvenes de la zona que quieren jugar y mostrar su talento en Torino.

Torino volvió a ser Torino, un equipo más del montón cuyo único objetivo es salvarse de la baja y reconfortarse con hacer buenos partidos en el Campeonísimo y no saber lo que es ganar de visita. Eso es Torino hoy en día, un equipo con problemas económicos que a duras penas podrá terminar la primera rueda del campeonato, siendo optimistas con 18 puntos de 45 posibles, y que una vez más debe llorarle a Petroperú para que "les tire la bolla" porque "la calle está dura" y el empresariado talareño les ha dado la espalda una vez más. 

Por Giancarlo Córdova - Twitter: @giancarlogcv