Cortijo: "Tuve que hacerme valorar como peruano"

La Escuela de Directores Técnicos de la Federación Peruana de Fútbol le brindó un homenaje al técnico Carlos Cortijo por sus títulos logrados con Deportivo Municipal y Comerciantes Unidos en la Segunda división.

El evento se realizó en el auditorio del Complejo Deportivo de la Federación Peruana de Fútbol durante la apertura del Ciclo Académico 2015 - II.

"Siempre traté de aprender algo nuevo de las personas que me enseñaban. No escatimé esfuerzos para trabajar en menores, llevar conos, llevar estacas y poco a poco ir creciendo para lograr la posibilidad de crecer como profesional. Tuve la oportunidad de ser jugador profesional en mi país, jugué la Copa Libertadores en Venezuela también, fui seleccionado nacional Sub 23 y Sub 20, pero eso no significa que uno haya conseguido el éxito total. Haber jugado al fútbol solo es una experiencia nueva, uno tiene que seguir capacitándose y buscando horizontes. Fui profesor de niños, trabajé en Interempresas, dirigí masters, dirigí Copa Perú, Ligas, y eso jamás me minimizó para seguir creciendo", contó Cortijo.

"Tuve que hacerme valorar como peruano, tuve que irme a dieciocho horas de Lima, a Cutervo, una ciudad donde no hay pan de molde, donde no hay un cine, donde no hay un mall, donde en tres cuadras se te acabó la ciudad, y eso hay que soportar para ser un profesional exitoso; hay que saber equiparar las fuerzas para compartir con la familia la lejanía. Es muy duro entrenar a doble horario, darse íntegro y conversar con la familia solo por teléfono, en la noche se iba la luz", agregó.

Luego, Cortijo, puntualizó que "hay que pensarlo muy bien, somos peruanos y hay que hacernos valer, no ser soberbios, el peruano tiene que saber trabajar. He sido asistente del profesor Rufino Bernales en el año 2006 en un equipo Curibamba, que nos íbamos hasta Andahuaylas para cruzar una meta y consolidar algo. El ser humano tiene que ser como una esponja, echarlo al agua y exprimirlo para sacar lo mejor de cada técnico y siempre demostrar tu capacidad, tener un buen manejo de grupo y algo muy importante: ser honesto. La palabra exacta en esta profesión es ser honesto. Tuve jugadores de 34 años, he tenido a Olcese de 40 años, lo hice correr, lo hice caminar, lo hice saltar, lo hice campeón, eso significa que no hay límites en el ser humano. Solamente hay que convencerlo que podemos hacer cosas grandes. Siempre hay que dar lo mejor. Cada práctica que sea como la primera de sus vidas y cuando consigan un objetivo, ustedes van a ver que es muy fácil".

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